Dónde comer tapas en tu próximo viaje a Barcelona

No todos los bares de tapas de Barcelona son creados iguales. Para que no te quedes atascado comiendo mediocre patatas bravas o forzarte a terminar el vermut malo, aquí está nuestra lista de los ocho mejores bares de tapas de la ciudad.

1. La flauta. Aribau 23.

Veinticinco años consecutivos, este elegante pero informal restaurante es un accesorio en el sendero de tapas de cualquier amante de la comida. Si te las arreglas para entrar, verás que es un punto de acceso para los lugareños con un ambiente bullicioso y multitudes animadas que hacen para una experiencia única en su tipo de comida. Con una política de no reserva, colas son de esperar, pero está garantizado que vale la pena la espera. La selección de mariscos se muestra en el bar, así que ¿por qué no tomar una cerveza y evitar el hambre con unas cuantas tapas frías?

2. Palosanto. Rambla del Raval 26.

Rambla del Raval es una de las calles más excéntricas de Barcelona y PaloSanto encaja bien. Con asientos al aire libre y Siesta induciendo la comida, es difícil irse. Bajo el ojo vigilante del famoso gato de bronce, usted puede elegir de las tapas únicas de Palosanto cocinado con amor y lleno de los sabores de la bondad casera. Tortilla española, croquetas caseras y patatas bravas sofocado en su salsa brava especial son sólo algunos ejemplos de la comida del alma para agarrar. Si todavía tienes sitio, ve por el pulpo o ensalada rusa, que se ha reinventado en su estilo palosanto.

3. La Llibertària. Talladoras 48.

Rodeado de tiendas de época y panaderías, la Llibertària es fácilmente imperdible. Pero una vez en el interior se descubre un refugio histórico con mucho más que una excelente comida en oferta. La Llibertària te lleva de viaje por uno de los períodos más tumultuosos de la historia de la ciudad: la guerra civil española. Colgados en sus paredes se encuentran pinturas originales, fotografías y carteles, dando a la clientela una visión del pasado de Barcelona. Su decoración distintiva le permite empaparse de la historia, mientras disfruta de una copa de vino y su selección de auténticas tapas elaboradas con recetas atemporales.

4. Bar Bitácora. Plaça de la unió 24.

Aunque ambos restaurantes ofrecen los mismos deliciosos platos, los comensales pueden esperar dos ambientes muy diferentes. Como en muchos de los pequeños bares de tapas de la Barceloneta, bitácora es un terreno muy frecuentado para aquellos en busca de buena comida. Si prefieres estar más lejos de la muchedumbre ruido, el restaurante Poblenou cuenta con un ambiente mucho más relajado. ¿por qué no construir un apetito con un paseo por el paseo marítimo y luego tomar un peso en la terraza donde se puede admirar la belleza arquitectónica del mercado de Poblenou.? Ambos restaurantes sirven una variedad de platos, catering para vegetarianos y amantes del marisco por igual. El tempura de espárragos en salsa romesco y ceviche fresco son los ganadores definitivos.

5. Chaka Khan. Hospital 104.

Chaka Khan es una nueva llegada a la escena del restaurante de la ciudad y ha traído con él sabores de todo el mundo, la creación de tapas como nunca has probado antes. Chaka, en la planta baja, es un bar de tapas con un ambiente informal. Khan, por otro lado, es un poco más, más formal tipo de comedor. Lo que sea que estés buscando, este restaurante está seguro de entregar. Su menú delimitador incluye pan iraní, comida callejera de África oriental y estofado de okra nigeriano. Situado en el corazón del Raval, su ambiciosamente variada carta de comida y cócteles lo han hecho destacar desde la multitud.

6. Jai-CA. Ginebra 13.

Si lo tradicional es lo que quieres, no encontrarás mejor que Jai-CA. Su menú de deliciosos platos de mariscos incluye todo, desde sepias y navajas hasta almejas a la brasa y calamares. A pesar de haber sido inaugurado hace más de 50 años por Jaimie y Luisa Cabot (de ahí el nombre), Jai-CA ha logrado mantener su encanto. El suelo blanco y negro a cuadros y la decoración intacta traen comensales de vuelta a los años pasados de Barcelona, asegurándose de que su visita es rica en atmósfera y sabor.

7. Bodega Cala del vermut. Magdalena 6.

Justamente famoso por su delicioso Vermut de etiqueta propia, que es tanto en TAP y barato, bodega Cala del vermut es un tesoro de la cultura y la cocina. Sus paredes están adornadas con fotos vintage de calas (pequeñas cuevas) e imágenes de la Costa Brava, que embellecen perfectamente su temática náutica. Es pequeño pero acogedor y perfecto para un vermut típico de la tarde de Domingo acompañado por su especialidad tapas frías.

8. Bormuth. Plaça comercial 1.

Bormuth te da la oportunidad de saborear no sólo los sabores sino también la arquitectura de Barcelona. Con vistas al mercado de bornes, que alberga ruinas de la ciudad medieval, puedes deleitar tus ojos con los diseños modernistas de Antoni Rovira i Trias mientras te metes en algunas delicias catalanas. Sirviendo a una deliciosa variedad de platos tradicionales, Bormuth es una apuesta segura, apetitoso y asequible. Especialidad Bormuth albóndigas y almejas de vino blanco en el menú, pero sus platos vegetarianos no se puede perder. La ensalada de lentejas frescas, así como las berenjenas empanadas con miel son sólo dos de sus opciones de menú de cobertura.